¿Cuál es la ventaja de tener una alimentación rica en fibra?

Una alimentación saludable tiene que contar con diferentes nutrientes, balanceados en las diferentes comidas del día. Siempre es mejor que sean alimentos caseros o preparados con ingredientes de calidad, ya que de esa manera nos aseguramos de consumir mejores nutrientes que los que pueden encontrarse en alimentos procesados. Y una de las cosas que no vamos a poder encontrar en los paquetes ubicados en las góndolas del supermercado son alimentos que tengan un alto contenido de fibra.

¿Qué es la fibra?

Es un tipo de hidrato de carbono que no puede ser digerido por nuestro cuerpo. Hace muchos años atrás, los nutricionistas solían recomendar su consumo ya que se creía que no le aportaba calorías ni nutrientes esenciales a nuestro cuerpo, por lo cual no iba a afectar en una dieta con reducción calórica. Sin embargo, estudios posteriores determinaron que la fibra ayuda a alimentar nuestra flora bacteriana, formando una simbiosis con ella y ayudando a que trabaje de manera correcta.

Cabe destacar que las bacterias que viven en nuestro intestino son una parte fundamental de nuestro sistema digestivo, ya que ayuda a absorber nutrientes que no pudimos procesar en el estómago. Contar con una flora intestinal en buen estado puede ayudar a impedir enfermedades como la colitis, la gastritis y la enfermedad de Crohn, entre otras.

Existen dos tipos de fibra: Soluble e insoluble.

Soluble

Tiene la capacidad de interactuar con el agua, formando un gel viscoso que se aloja en nuestro intestino. También estabiliza el azúcar en sangre (ayudando a prevenir la glucemia), reduce el colesterol y genera una sensación de saciedad.

Insoluble

Como su nombre lo indica, no cuenta con la capacidad de unirse a las moléculas de agua y su estructura permanece fija. Debido a esa propiedad, funciona como una “escoba” que ayuda a que los alimentos pasen de manera más fácil por el tracto digestivo. También evita el estreñimiento, aumenta el tamaño de las heces y ayuda a saciar más rápidamente el apetito.Está comprobado que la presencia de este tipo de fibra en una alimentación saludable puede reducir el riesgo de cáncer de colon.

Algunos alimentos ricos en fibra son:

• Vegetales fibrosos (zanahoria, acelga, espinaca)
• Frutos secos
• Legumbres
• Cereales integrales (avena, centeno, sarraceno o arroz integral)
• Frutas (manzana, durazno, pera, mandarina, ciruelas, higos)
• Frutas disecadas
• Semillas (cuando no están triturada o hidratadas)

La recomendación diaria de fibra es entre 25 y 35g.

Nuestra flora intestinal está habitada por probióticos, microorganismos que se encuentran en algunos de los alimentos que consumimos a diarios. ¿Querés sabés por qué son tus aliados saludables? Leé este artículo.

Si bien siempre es recomendable que la fibra sea parte de tu alimentación, tené en cuenta que su consumo tiene que ser medido y equilibrado. En caso de que consumamos más de un tipo que del otro o que no tomemos suficiente cantidad de agua, se puede generar un efecto contrario al normal y provocar estreñimiento.

Tené en cuenta que si tenés hipotiroidismo y estás realizando un tratamiento con levotiroxina no podés consumir grandes cantidades de fibra, ya que interfiere en la absorción del medicamento. La recomendación máxima en esos casos es de hasta 3,5 gramos, ya que está comprobado que no afecta el tratamiento.

Una alimentación saludable no es igual para todas las personas. Un plan de alimentación puede variar muchísimo si se tiene en cuenta el objetivo y las condiciones de salud de cada persona. Es por eso que es importante que cualquier plan nutricional sea preparado por un profesional de la salud. Y recordá también que para lograr tus objetivos no solo debes abarcar la nutrición sino los tres pilares para tener una vida saludable: la alimentación, el movimiento y el autoconomiento

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